Palo Santo es nuestro queso más emblemático. Símbolo de tradición y de elaboración artesanal. Su receta data del S. XVIII, y cuenta con una curiosa historia que te vamos a contar en este post:
La receta de Palo Santo fue recuperada del Monasterio de San Bieito de Pereira, en Cuntis, Galicia. Los monjes benedictinos utilizaban un ‘palo santo’ para remover la cuajada de la leche de vaca y así elaborar un queso de pasta semi blanda, color lechoso, aroma sutil y sabor suave.
Después, se maduraba varios meses en las bodegas del convento dando origen a un queso que se ha convertido en un verdadero símbolo del Camino Portugués de Santiago.
La receta actual es usada tal cuál como se hacía en esa época. Desde 1984 se elabora en nuestras instalaciones de Central Lechera Gallega, respetando la receta exactamente igual que en antaño y respetando los más exigentes estándares de calidad. Por eso nos esforzamos por cuidar de nuestra principal materia prima: la leche. Procedente de los pastos y las explotaciones lácteas de Galicia de dónde sale la mejor leche de España.
Gracias a los acuerdos de colaboración que hemos establecido a largo plazo con ganaderos y cooperativas lácteas gallegas de nuestro entorno podemos asegurar el suministro de una materia prima de máxima calidad; a la vez que contribuimos a la sostenibilidad social, económica y ambiental de un sector básico para Galicia.
El consumidor y la mejora de su experiencia son el centro de nuestros proyectos y decisiones. Entender sus nuevas necesidades, sus hábitos y sus preferencias nos impulsa a mejorar cada día y a no dejar de innovar en ningún momento. Por eso tenemos Palo Santo en distintos formatos para adaptarse a cualquier situación:
Piezas de gran tamaño para compartir en familia y eventos, de 10 y 3 kg. Palo Santo Mini, que mide aproximadamente 12 centímetros de diámetro por 7 cm de alto y pesa 500 gr. para compartir en el día a día, o en un descanso.
El Queso Palo Santo es un queso de leche de vaca que se puede degustar solo, acompañado de miel, membrillo, frutos secos… Lo podemos acompañar de un vino albariño fresco, suave y aromático y disfrutar de un gran momento.